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viernes, 30 de diciembre de 2011

propósitos cotuféricos para el año que viene

feliz año a todas mis niñas y niños que me leen!

Ha llegado el momento de hacer la lista de los propósitos para el año que viene. Como si las fechas importasen. Ay, el universo es indiferente a nuestras mediciones, pero no podemos evitar sentirnos los dueños de todo. Somos semi dioses psicóticos y divertidos.

Bueno, a la tarea:

Relativo al peso: alcanzar los 46: que solo faltan tres, no es tanto! Dejar los laxantes y los diuréticos y no atiborrarme de comida para no sentirme culpable después.

Relativo a la salud mental: mantenerme feliz y durmiendo bien. No buscarme más problemas reales o imaginarios. Sobre todo no los imaginarios. Salir de mis paranoias y de las obsesiones.

Relativo al trabajo: aplicar para ser astronuta y si no lo consigo, seguir aprendiendo, normalita como estoy.

Relativo a la vivienda: pagar mis deudas y buscarme una casa más grande en la misma urbanizción donde vivo, o algo similar. Importante que tenga piscina.

Relativo al ejercicio: Conseguir practicar yoga al menos dos veces a la semana.

Relativo al arte: seguir dibujando, seguir pintando, lograr vender algunas cosillas. Tomar las clases en torpedo factory o concursar para alguna exposición colectiva. O individual.

Relativo a la familia: comunicarme mas y mejor con todo el mundo, y sobre todo, no ocultar mis emociones.

Eso es todo, feliz año otra vez. Millones de gracias por leerme las estupideces y las seriedades también.

jueves, 29 de diciembre de 2011

suicidal toughts

Antes que nada despreocúpense. No estoy pensando en suicidarme, ni lo voy a hacer.


Ya calmados, pues si. Los pensamientos suicidas han sido una recurrencia en mi vida, toda mi vida. Talvez porque conviví con una madre parasuicida y un padre alcohólico, tengo más conciencia de la destrucción y de la muerte, que de la vida y del disfrute.


Estoy publicando en este blog la misma entrada que publiqué en Artefactos del Olvido porque se que algunos de mis lectores de chaseland no leen mi otro blog. Y pienso que puede ser esclarecedor talvez para algunas.


Cuando uno le confiesa a alguien que esta pensando en suicidarse la reacción por lo general es de rabia, miedo, incomprensión y rechazo. El suicida en ciernes en lugar de encontrar comprensión y afecto, lo que encuentra es todo lo contrario a lo que busca. Contradictorio verdad? Porque se supone que si uno lo que busca es afecto, no debería buscar el afecto en la muerte sino en la vida. Y mientras más fabulosa es en apariencia la vida del suicida, pues peor y más absurdo parece el pensamiento de la muerte para los que están afuera que además afirman quererlo a uno.


Al suicida, al deprimido, al enfermo, no le queda más remedio que culparse a sí mismo por tener tales pensamientos. Convencerse de que el extraño, el outsider, es él mismo.


Y es que,  bueno, este es un post muy difícil de escribir, porque estoy ahora mismo ordenando las ideas y la cosa no esta quedando tan clara en las letras como en mi mente. Pero prosigamos, que igual no es que me importe demasiado ya la falta de calidad literaria de mis posts.


Talvez lo mejor sea comenzar por el principio y preguntarse por qué el suicida busca afecto. La respuesta más obvia es casi siempre la verdadera no? Pues bien. El suicida busca afecto por la misma razón que cualquier persona busca afecto, porque el afecto, las emociones, la comunicación, son necesidades vitales de cualquier individuo. Entonces si queremos comenzar por el principio de las cosas, no se puede comenzar a pensar en el individuo a partir de su madurez, sino que hay que pensar en el individuo a partir de su inmadurez y su propia historia personal de desamor. El desamor no es nada más haber tenido mala suerte en las relaciones de pareja. El desamor nace en el nacimiento mismo. En la infancia.


Si una persona no es deseada como hijo, si su venida al mundo no es celebrada con alegría y afecto sino con dolor, ansiedad y tristeza, si su presencia en el mundo es una carga más que una bendición, entonces es más que normal que esa persona no se sienta querida desde el instante mismo en el que nace. Pero ah! Recuerden que a ese niño o a esa niña, le van a enseñar desde chiquito que sus padres SI lo aman. Aunque sea mentira. Sus propios padres angustiados, van a intentar por todos los medios creerse su propia mentira de que sí aman y cuidan a ese niño que en realidad no deseaban para empezar y que les complica terriblemente sus planes personales. Peor aún, a ese niño le van a enseñar también que DEBE amar y honrar a sus padres y además estar agradecido de tener vida y poder vivirla.


Yo siempre digo que las emociones, lo incontrolable, lo inconsciente, existe. Podemos negarlo, podemos ignorarlo, podemos elaborar tesis y tratados que refuten su importancia. Pero será siempre como negar la existencia de las piernas  y negarse a utilizarlas. Las piernas estarán alli, atrofiadas e incapaces de andar, pero seguirán amarradas al cuerpo. Pues igual. Las emociones son innegables y por muchos esfuerzos que hagamos para ignorarlas o cambiarlas o sentir otra cosa diferente, la evidencia de la emoción original seguirá existiendo en el inconsciente y buscando expresarse de un modo u otro.


Entonces, las emociones que experimentamos de niños, si son "negativas", y lo pongo entre comillas, porque con la palabra negativa no quero juzgar sino expresar que esas emociones niegan la existencia del afecto y la comunicación, el niño que las experimenta, aprenderá entonces es que sus emociones no valen. Que sus protestas, su llanto y su necesidad de atención y de cariño son anormales y deben ser modificadas. En pocas palabras, que debe portarse bien y no molestar a sus padres, para que sus padres puedan continuar con su vida.


Si ese niño llegase a desarrollar algun tipo de conducta anormal, será inmediatamente diagnosticado por médicos o sicólogos que le pondrán una etiqueta de "desorden mental" y le dirán que su pensamiento es erróneo y que debe aprender a pensar de otra manera y a valorar las cosas de otro modo. El error está dentro de sí mismo y no afuera. Es su culpa sentirse mal y actuar en forma anormal.

I am the voice inside your head and I control you
I am the hate you try to hide and I control you
I am denial guilt and fear and I control you
I am the lie that you believe and I control you
I am the high you can't sustain and I control you
I am the truth from which you run and I control you
I take you where you want to go
I give you all you need to know
I drag you down, I use you up

A ese niño o niña le enseñarán entonces que sus emociones, el odio, la indignación, el dolor, y la culpa, son mentiras. Son distorsiones de su pensamiento, en pocas palabras lo dejarán fuera de sí mismo. Le demostrarán que es su culpa estar enfermo, que su desorden lo define y lo limita y lo maldice.

En la religión encontrará muy poco consuelo el niño que no es amado. Al menos en la tradición católica que es la que yo conozco, le dirán: no importa que tu padre no te ame. Dios te ama. No importa que tu madre no te ame. La virgen maría es tu madre y te ama. Pero eso también es mentira, y es tan sólo la prolongación de la mentira original paterna. Dios lo amará en la medida en que cumpla sus mandamientos. Si no los cumple, si peca, si se equivoca, dios le condenará al infierno infinito. Igual que le condenaron tus padres con su indiferencia e irrespeto. Igual que le condenan tus hijos o sus parejas, por su incapacidad para sentir amor. Será su culpa y no su carencia.

No somos los dueños de nuestro propio cuerpo, nuestro cuerpo pertenece a nuestros padres en la infancia, a nuestros amantes o parejas en la adultez, y ultimadamente a Dios mismo. Y todos ellos que dicen amarnos en realidad nos ignoran y nos dictan unas pautas acerca de cámo debemos actuar y pensar. O peor aun como NO debemos actuar o pensar. No fornicar, no matar, no robar, no mentir, no, no, no. Si te matas a ti mismo asesinas al templo de dios mismo. Cometes el peor pecado que puede existir que es desconfiar de la infinita misericordia de dios. Pero es eso verdad? Puede un dios o un padre infinitamente misericordioso ignorar atómicamente la necesidad emotiva de una persona? es la negación el camino a la salvación o es el camino al infierno mismo?

Si un suicida se asesina, le espera la indiferencia eterna de Dios, el infierno, o el odio infinito de no haber honrado la vida que le regalaron los padres aunque esa vida ya haya sido un infierno pintado de colores pastel, o el supuesto amor que nos regala nuestra pareja o nuestros hijos en forma de control y obediencia ciega a sus deseos y necesidades.

El suicida en realidad no está haciendo algo absurdo, mis queridos lectores. Está tan solo reflejando y obedeciendo aquello que le fue enseñado y llevándolo hasta sus últimas consecuencias. La negación absoluta de su ser y el respeto por su spropias emociones su vida y sus sentimientos.

Feliz año nuevo.

martes, 27 de diciembre de 2011

never again

No vuelvo a comer asi mas nunca en mi vida...

Un mensaje a aquellos que pretendan viajar en un crucero: no se puede comer tanto en tan pocos días, eso no puede ser bueno ni sano para el estómago!!!

Engordé DOS espantosos kilos en tan sólo una semana, no pude tomar laxantes sino hasta el final del crucero (no se sabe si uno va a tener donde ir al baño en una isla del tercer mundo) y el último día ya me quería tirar por la borda y no hablar ni socializar con mas nadie más nunca...

Ya me lo habia advertido mi shrink y mi claudia que a lo mejor me iba a sentir ansiosa, y tuvieron toda la razón de mundo, y es extraño, porque no es que tenga malos recuerdos del barco, es sólo que la ansiedad de comer como una persona normal, terminó por sobrepasarme...

Dieta de desintoxicación por un mes, hasta que me saque toda la basura que me comi!

Yo es que no entiendo esta obsesión social por la comida, que todo hay que celebrarlo es metiéndose cosas en el estómago hasta hacerlo doler... Detesto comer co....o! Detesto fingir que si me gusta la comida y que soy normal! que no! que no soy normal cara...o!

Siempre están diciendo que anorexia que bulimia, que la gente que no come esta enferma y tal, pero no son acaso igual de enfermos los que se atiborran de comida? Cómo puede ser sano comer tres platos de comida en lugar de uno solamente en una misma sentada? Meter en el estómago más de lo que cabe y mas de lo que se necesita tan sólo por saciar el placer lúdico de saborear algo?

Están enfermos todos los que diseñan los menús en los restaurantes, enfermos todos los dietistas que afirman que uno necesita 2000 asquerosas calorías al día. Que uno puede adelgazar y estar sano comiendo.

La única verdad es que para poder estar delgado y sano, hay que ayunar al menos dos veces a la semana o comer muchísimo menos de lo que recomiendan por ahi. Yo ya no creo en BMI's. Creo en el espejo. Creo en mi propia capacidad para juzgar cómo me siento, y cuando como mucho, me siento MAL.

No hay que dejarse engañar.

martes, 13 de diciembre de 2011

cruise


había una vez un barquito chiquitito...
 
Hola blogcito mío del alma querida que te tengo tan abandonado, ya te voy a escribir algunas cositas para que no te sientas tan solito, pobre.


En fin que voy mucho mejor con lo de los laxantes, deje de tomar senósidos porque se me estaban abriendo un hueco en el estómago, pero igual de vez en cuando me tomo mi leche de magnesia como para aplacar a las bestias que dicen que voy a engordar diez kilos en un dia.

No engordo, no adelgazo. Bueno si, he adelgazado otro poco, porque obviamente ante la imposibilidad de los laxantes es mejor evitar la comida, pero ahora me veo tan demacrada que estoy comiendo un poco mas para contrarrestar. Asi que seguramente ganaré lo perdido.

Es como si ya mi cerebro no pudiese más volver a los lugares oscuros. Las voces me llaman (es un decir) y yo quiero ir. Es un lugar horrendo pero estoy tan habituada que es como mi hogar y sin embargo ya no es tán fácil volver. Así que no me quejo. Me quedo del lado luminoso de la fuerza y ya.

El viernes me voy de vacaciones (merecidísimas) a un crucero por el Caribe. Anoche metí ocho bikinis en la maleta. Soy una exagerada, sin duda. A ver si logro sobrevivir el exceso de comida malsana que abunda en esos barcos.

También me sucedió algo medio tragicómico. Resulta que el tinte de pelo que yo usaba lo descontinuaron y entonces tuve que probar uno nuevo. Yo elegí el mismo color que usaba antes, pero el color resultante fue anaranjado. En cuestion de 20 minutos me convertí en strawberry shortcake. Un horror. No podía irme pelirroja para el crucero asi que ayer compré otro tinte más oscuro y me lo volví a teñir. Sigue un poco rojo, pero al menos ya no alumbro por las noches...

Y eso es todo. Mañana tengo cita con Claudia, pero me da una pereza gigante pensar acerca de qué vamos a hablar. Creo que soy la única paciente compulsiva que prepara sus sesiones con atelación y toma notas de lo que quiera hablar y además se lleva las notas a la cita! Que galla por dios!

miércoles, 7 de diciembre de 2011

will you still love me tomorrow?

Esa pregunta tan triste.

Cada noche.


Tonight you're mine completely
You give your love so sweetly
Tonight the light of love is in your eyes
Will you love me tomorrow?

Is this a lasting treasure
Or just a moment's pleasure?
Can I believe the magic of your sighs?
Will you still love me tomorrow?

Tonight with words unspoken
And you say that I'm the only one, the only one, yeah
But will my heart be broken
When the night meets the morning star?

I'd like to know that your love
Is love I can be sure of
So tell me now, cause I won't ask again
Will you still love me tomorrow?
Will you still love me tomorrow?
Yeah

gracias Amy

martes, 6 de diciembre de 2011

mantra

Yo puedo
Yo puedo
Yo puedo
Yo puedo

Bajar de peso sin enfermarme

Verdad que si??

viernes, 2 de diciembre de 2011

ordenar

Anoche tuve un sueño de esos reveladores y Jungianos. Se los voy a contar por aqui junto con la historia que lo acompaña a ver qué opinan. Ya yo sé lo que creo que quiere decir y es buenísimo, pero igual es bueno escuchar opiniones de otros/as verdad?

Primero explicar la historia que lo acompaña.

Cuando yo tenía trece años viví el trauma de quedarme sin vivienda. Mis lindos papis que eran un par de irresponsables y que no se comunicaban entre si, se hicieron los ciegos y el día llegó en que apareció un tribunal en la casa y tuvimos que meter nuestras cosas en una maleta y mi papa lloró y despues desapareció y mi mamá (que estaba en el trabajo) no se enteró de nada hasta que la llevaron a un sicólogo y el sicólogo le dijo lo que estaba sucediendo. A nosotras nadie nos llevó a un sicólogo claro. A nosotras (mis dos hermanas y yo) nos dejaron en el apartamento de la playa, en una isla, solas por nuestra cuenta durante un mes o dos. Eso no lo recuerdo. Lo que sí recuerdo es ver a estos hombres metiendo todas nuestras cosas en bolsas y llevándose los muebles y a nosotras salvando las vajillas y las cosas que podían romperse y eran valiosas y llevándolas a la casa de los vecinos (que por suerte estaban de vacaciones) porque que la señora de la limpieza nos permitió llevarlos alli mientras tanto. También recuerdo (y les cuento que tengo un mareo impresionante al escribir estas cosas), que aquella noche no teníamos ni idea de dónde íbamos a dormir, y que mi papá como siempre a eso de las cuatro de la tarde se fue al bar a beber y que cenamos pollo frito en una cadena de restaurantes de estos de comida rápida (el tropiburger de los palos grandes) con mi mamá y que después dormidos amuñunadas en un cuarto en el apartamento de los vecinos. Ni mi abuela ni ningunos de mis tíos apareció por ahí y yo todavía no me entero de por qué. Ni de porqué no nos quedamos con ellos en lugar de irnos solas al apartamento de la playa. En fin. También recuerdo que yo no me atrevía a llorar. Me daba pánico de que si empezaba a llorar, todos nos íbamos a desmoronar y eso no le iba a hacer bien a nadie. Así que ahí nadie lloró. O talvez mi mamá si, no me acuerdo. Mi papá llegó a eso de las dos de la mañana, bebido como siempre, y yo no entendía cómo era posible que la vida continuase sucediendo y el tiempo siguera transcurriendo como si nada.

Al día siuiente se suponía que nos íbamos a Margarita (la isla) con la señora de servicio que había estado con nosotras durante tanto tiempo. Pero mientras esperábamos el autobús que nos iba a llevar nos dimos cuenta de que ella no iba a llegar y nos fuimos con mi papá. Del viaje hasta la isla no recuerdo absolutamente nada. No sé si nos fuimos en autobús o si mi papá manejó. No recuerdo nada. Sí recuerdo que la noche que llegamos, vimos drácula en la televisión y que yo por primera vez en mi vida dormí como si me hubiesen dado un martillazo en la cabeza. Es decir, cerré mis ojos y al abrirlos dos segundo después, ya era de día. También recuerdo que después de mudarnos, una noche de insomnio, mi mamá me dijo llorando, que yo tenía la culpa de todo lo que había sucedido, porque no le avisé lo que estaba pasando. (no comments)

Toda esta introducción larguísima es para que podamos comprender mi sueño de anoche.

En mi sueño, estábamos mis papás y yo en el apartamento nuevo de después de la debacle. Era una combinación claro de todos los apartamentos anteriores, pero el asunto importante es que estaba desordenadísimo. Como si al mudarnos hubiésemos colocado las cosas de cualquier manera y allí se hubiesen quedado sin que nadie las tocase por mucho tiempo. Todo lleno de cosas por todos lados, adornos, fotos, mesas, muebles, periódicos, de todo. Mis padres seguían haciendo su vida de negación en forma usual y yo no soportaba más aquel apartamento tan pequeño y abigarrado de cosas y sentía que me ahogaba. Asi que le decía a mi mamá - mamá ya basta de acumular cosas, parecemos hoarders viviendo así. Así no se puede vivir, tenemos que botar todas las cosas que no usamos y guardar todas las que están afuera en su lugar para que podamos tener espacio. Y a sabiendas de que nadie me iba a ayudar porque aquello seguramente les iba aparecer una empresa tremenda e imposible de conseguir, me puse a ordenar yo sola (como siempre). Y fui vaciando, y vaciando y vaciando el apartamento, y ordenando y limpiando hasta que encontré una puerta que pensé en principio que era un clóset. Al abrir esa puerta me dí cuenta de que habían otras tres habitaciones, ordenadísimas y enormes y con ventanas llenas de luz. Alguien en algón momento la había cerrado y nadie más la había vuelto a abrir. Yo me alegré muchísimo pues me sentí finalmente desahogada de haber habitado siempre el mismo lugar y haber descubierto que existían otros lugares y otras cosas y que además estaban ahí mismo, en mi casa. Entonces llamé emocionadísima a mis papás y a mis hermanas y les mostré las habitaciones, y los salones que había encontrado que además tenían camas suficientes como para la familia entera y dos baños más y una habitación de bebé lindísima, como para poner allí a un bebito o una bebita. Y todos nos alegramos mucho y nos sorprendimos mucho de descubrir que todo aquello estaba alli y que nunca lo habíamos usado antes.

Eso es todo.  Feliz fin de semana para todo el que me lea. Como yo siempre digo, parezco de librito...

jueves, 1 de diciembre de 2011

monólogos psicoterapéuticos xvi

Ya sé que esta foto
no tiene nada que ver pero es que
me gustó mucho la ovejita :)
Ayer mi linda Claudia me volvió a marear en ese sofá. Ella no se queda tranquila hasta que le digo -  me duele la cabeza! estoy mareada! para ya! y entonces hablamos de otra cosa hasta que me calmo y vuelve a la carga. Ella dice que el mareo me lo causa la ansiedad que me produce tener sentimientos reprimidos. Yo les juro que hasta ahora que voy a sicoterapia, jamás me hubiese imaginado que yo era una persona reprimida. Y mucho menos me hubiese imaginado que esa represión me pudiese causar síntomas físiscos tan brutales y reconocibles.

Me habló de la pérdida del yo. Y me mencionó este libro de Alice Miller que se llama "The Drama of the Gifted Child" y que plantea por primera vez la idea esta de que uno como adulto busca compulsivamente rellenar los huecos emocionales que una infancia abusiva nos deja. Alice Miller también escribió este otro libro (entre muchos), y que publicó en 2005 que se llama "The body never lies", que trata también de las enfermedades alimenticias y de cómo ellas son un reflejo de las cosas que uno ha ido reprimiendo desde la infancia.

Si bien en este momento de mi vida no podría decirse que sufro de anorexia, porque yo me obligo a comer (con lo cual lo que desarrollé fue una bulimia) revisando mi infancia y adolescencia, Claudia y yo nos hemos dado cuenta de que la sufrí durante muchísimo tiempo y desde muy niña. La primera referencia que tengo de mis problemas alimenticios se remonta a cuando tenía dos años. Mi mamá siempre contaba - un poco orgullosamente - cuando la gente le preguntaba acerca de mi flacura, que yo siempre había sido un problema para comer y que cuando tenía esa edad, ella toda preocupada llamó al pediatra y le preguntó qué hacer con mi falta de apetito. El pediatra, bien anticuado el, le respondió: no le des mas comida hasta que la pida, eso es una malcriadez de ella. Asi que yo estuve dos días sin pedir comida o agua o nada de nada. Cuenta mi mamá que cuando ya me vió dándome tumbos contra las paredes, porque no podía ni caminar, volvió a llamar al pediatra y éste le dijo que me diese un tetero para que no me deshidratase. Y ahi ella perdió toda esperanza de verme comer con apetito como a sus otras dos hijas. Eso sin hablar de las arqueadas y los regaños cada vez que arqueaba poruqe me obligaban a comer - o sea, todos los días y a todas horas -. Mi infancia, es un solo recuerdo infinito de todo el mundo intentando engordarme para dejar de estar por debajo del peso "normal" y de mi misma intentando contener el asco que me daba tratar de comer y de reprimir el movimiento involuntario que me producían las arcadas y las ganas de vomitar. También recuerdo cómo mi mamá me mostraba cada revista o artículo donde salían noticias sobre anoréxicos o de niñitos desnutridos del áfrica o de donde fuese y me decía así te vas a poner tu si no comes. Será por eso que odio que me pregunten si comí o que me digan que coma.

La pregunta de las sesentamil lochas es cuál es el sentimiento que sigo reprimiendo que me causa esta aversión por la comida o esta culpabilidad cuando como. Claudia dice que la comida es el bien fundamental del cuerpo y que cuando uno no tiene recursos para enfrentar las situaciones, pues se va a lo más básico que puede controlar, que es la comida y encuentra estructura en eso; pero que si uno llega a poder entender qué cosas le causan esos sentimientos y se da cuenta de que las amenazas fantasmales de la infancia ya no existen, uno será capaz de aprender a disfrutar de las cosas sin victimizarse. Sin tener miedo. Y entonces ya no necesitará las defensas.

Talvez si uno llegase a recibir todo el cariño que le faltó en la infancia y que le sigue faltando en la adultez, si uno llegase a ser capaz de sentir verdaderamente ese amor y no una dependencia o un ansia por rellenar un agujero de dolor, uno sería capaz de curarse de toda la confusión y distorsión educativa con la que uno crece. Y toda la disociación desaparecería, y uno encontraría su yo verdadero y encontraría también que vale la pena estar vivo y vivir... y claro está, comer.

Yo me siento mal, porque parte del probleme de tener un desorden alimenticio es querer llamar la atención y eso suele tener connotaciones negativas. Eso es lo que le enseñan a uno. No busques atención eso es de las personas egoístas. Pero resulta que a través de la terapia lo que estoy aprendiendo es justamente, que necesitar atención está bien. Y que aprender a recibirla y a disfrutarla también está bien. Yo que detesto que me atiendan, tengo que aprender a dejarme atender. La represión no es lo que cura, lo que cura es el cariño.

lunes, 28 de noviembre de 2011

secretos

Mi vida está llena de secretos. Yo no sé si podría vivir sin ellos, porque mis secretos han ido creciendo y creciendo conmigo desde chiquita. Como los amigos imaginarios. Cuando dejé de ver a los amigos imaginarios, comencé a tener secretos.

Algunos de mis secretos, son tan secretos que tan solo yo los sé. Algunos los comparto con algunas personas. Pero no todos. Soy selectiva con los secretos. Talvez tan sólo Claudia, mi terapista, los sepa todos. Pero no, ni ella. Ella solo esta comenzando a ver la punta del iceberg.

Mis secretos son como almohaditas lindas. Los lugares donde vivo mis vidas paralelas.

Es tan enorme mi disociación que aveces temo no ser capaz de llevar una vida que no sea secreta y paralela. Talvez porque en mis secretos me siento confortable y en cambio fuera de ellos, en la intemperie, estoy a la deriva del mundo. Y yo me siento mejor viviendo en el secreto que viviendo en la realidad.

No hay nada mas rico, por ejemplo que hacer una dieta secreta. O alguna otra disciplina o locura que solamente yo sepa. Y al final del día o al dia siguiente poder decir: pude, lo hice. Y nadie supo. Es un triunfo solitario, sin duda. El triunfo de uno mismo contra uno mismo. Y de mi peor enemiga. Mi enemiga secreta. Mi única amiga de verdad.

Supongo yo que mi frenemie nació en mi infancia. Mi amiga-enemiga es como una defensa al control del marasmo. Una defensa personificada y con vida propia. Ella me defendía entonces de unos padres desastrosos que pretendían que me estaban cuidando mientras yo me perdía y me perdía y me burlaba de ellos secretamente.

Ah, que placer me dan los secretos. Que placer le dan a ella. Me gusta mirarla cuando está. Ella me deja descansar y se ocupa de todo mientras yo sigo acostadita oliendo mi almohada. Se ocupa de que esté bonita. Y sobre todo se ocupa de que no engorde más nunca. y de que más nunca vuelva a ser fea y boba. Ella está ahí para mi. Ella me defiende de todos los hombres malos. Ella me defiende de toda la comida podrida.

Esa sensación de poder, de saber algo que nadie más sabe... eso es lo que la alimenta a ella.

Rebelarse. Esa es una defensa también. Ella es mi medio para rebelarme.

Todavía no logro identificar muy bien de qué me estoy rebelando ni porqué necesito portarme mal.

Posiblemente sea el secreto primigenio. El más horrendo de todos. El que no me da la gana de recordar.

martes, 22 de noviembre de 2011

anorexia mirabilis

Santa Catalina
patrona de las anoréxicas
Ora pro nobis...
Hace días (semanas) que no me siento nada bien con el colon. Un dolor que no me deja ya ni comer sin pánico. Eso se debe, obviamente al abuso de laxantes. Yo lo sé. Y lo que me causa más frustración es que yo pensaba que podía dejar de tomarlos cuando yo quisiera y resulta que no es así y ya llevo mas de un año en este ciclo y nada de nada. Asi que ayer, fasitidiadísima y bastante preocupada me aboqué pues a la tarea de investigar un poco las consecuencias de este comportamiento mío descontrolado, aparte de las ya bastante obvias.

No sé muy bien cómo llegué a encontrarme con esto. Pero fue esclarecedor.

Primero que nada me gustaría advertir que este NO es un post pro-anorexia. Por si a las moscas, que uno nunca sabe. Es tan sólo un post que busca criticar de manera más o menos lógica - es decir con la poca lógica que le queda a mi cerebro alterado químicamente - esa definición de desorden alimenticio del  "Manual of Mental Health Disorders (DSM-IV)".

Resulta que existe una anorexia - o existía en la antiguedad - que se llama Anorexia Mirabilis. Esta anorexia era la que practicaban las santas de antaño y que era considerada una prueba de fortaleza espiritual, no una enfermedad, claro. La lista de santas que fallecieron gracias a la enfermedad o la sufrieron en algún momento de sus vidas, es pasmosamente larga. Casi todas ellas rehusaban la comida, o algunos alimentos específicos como la carne, entre otros sufrimientos que se infligían a sí mismas, tales como flagelaciones, caminar descalzas en el invierno, ponerse cilicios que les cortaban la carne, mutilarse los genitales, etc. Algunas hasta comían el pus de las heridas de los enfermos que atendían. Y claro está, los curaban; (ya se sabe que si extraes el foco infeccioso de la  la herida ésta tiende a curarse, y que la saliva tiene cualidades antibióticas), pero por supuesto si aquello te lo hacía una Santa Anoréxica en aquella época, pues era considerado un milagro tranquilamente. Y esas luchas contra los demonios de las cuales eran presas también  casi todas ellas, eran consideradas luchas externas, no internas. Eran una demostración de santidad. Estas anoréxicas eran tan pero tan buenas, que los demonios se ensañaban contra ellas. Y ellas contrarrestaban los ataque demoníacos con ayunos y autoflagelaciones. Hoy en día te darían un antipsicótico y ya.

Así que las mujeres "perfeccionistas" de la antiguedad, practicaban los ayunos como una forma de fortalecerse. De sentirse superiores en el espíritu y vencer la "debilidad" de la carne. Como una forma de controlarse, básicamente. Y de agradar a dios. Para establecer el orden divino en el caos circundante. Para sentirse fuertes en un mundo que las hacía frágiles e ignoradas desde la base y que tan sólo a través de esa demostración sobrehumana de fortaleza podían distinguirse de las masas y sentirse reconocidas como individuos.

En la definición de la anorexia nervosa del bendito manual en cambio, asocian la enfermedad a la presión social, o a un desorden borderline de la personalidad, o a otras condiciones que cohabitan con la enfermedad tales como el desorden obsesivo compulsivo o la depresión o la dismorfia corporal.  Como si trascender la carne y fortalecer el espíritu no fuese tambien una dismorfia. No querer ser carne, desear trascender lo material a través del control y el ascetismo. Y la flagelación? Pues yo me he dado de golpes contra las paredes, me he dado correazos hasta dejarme morados, me he cortado por todas partes con mi cuchillito de plástico. Y no necesariamente por agradar a diosito con eso. Lo he hecho para controlar el marasmo externo e interno. Para sentirme viva y no muerta. Para controlar a mis demonios en léxico antiguo.

La principal diferencia que veo yo en esto, es descartar de plano el deseo de trascendencia de la persona que sufre la enfermedad alimenticia. Y considerarla de base una cabeza de chorlito que en lugar de trascender espiritualmente simplemente quiere verse como modelo de revista Vogue.

Y tomemos en cuenta que en esta entrega de la anorexia mirabilis for dummies, no me he puesto a hablar de los ascetas, yoguis e iluminados del oriente... que ahi la lista es todavía más larga. Pero eso será para la próxima.

Queridas amigas... qué fácil es ser una iluminada!

jueves, 17 de noviembre de 2011

monólogos psicoterapéuticos xv

Todo tiene un precio. Tomar esta maravillosa pastilla me hace estar bien y sin efectos secundarios molestos.
Es difícil en realidad distinguir si el efecto secundario es molesto o no. Porque perder la capacidad para sentir el placer del orgasmo (tambié conocido como impotencia o anorgasmia) es molesto. Pero no afecta con el día día. O perder la capacidad para escribir coherentemente y armar un buen texto tampoco molesta. Tan sólo vacía.

Sin embargo estar vacía puede ser una ventaja. Y gracias a que soy muy cerebro de castor, sé cómo convertir las desventajas en ventajas. Vaciarse supone un inicio. A fresh start. Una oportunidad para llenar de nuevo la jarra de lo que sea que uno quiera llenarla.

Ayer en mi terapia discutía yo con Claudia que si bien ya sé cómo distinguir el momento en el que mi mente me lleva a la sensación destructora de la indefensión, todavía sé cómo hacer para pelear con eso. Porque el sentimiento de indefensión parte de la renuncia al placer, de la renunncia a la felicidad. Y esa renuncia genera una defensa. Mi defensa es situarme por encima de la necesidad de placer y por ende renunciar a él y a cambio de eso abrazar al dolor como un medio de hacerme fuerte.

La respuesta de Claudia fue como siempre, esclarecedora: La defensa es correcta si la situación es amenazante. La cosa es que si ya no necesitas defenderte de nada, porque la situación que generó esa defensa, ya no existe, la defensa es absurda. Tu sigues actuando de la misma manera porque aprendiste asi, tu ego aprendió a responder así. Pero cuando respondes de esa manera a situaciones positivas o que no generan amenaza, en realidad el resultado termina siendo contraproducente y terminas haciéndote más daño a tí misma, es decir, generando tú misma el peligro para poder justificar las defensas.

Total que uno termina siendo el peor enemigo se sí mismo...

Así que lo que tengo que hacer es cambiar la conducta. Dejar de generar situaciones que me ponen en peligro o que me causan estrés. Cómo se hace eso? Reconociendo los motivos que me llevan a una conducta o a otra, razonando y haciendo lo contrario.

La ventaja de las pastillas es que si antes eso me generaba estrés y ansiedad, ahora ya no me lo genera.

Maravillas de las drogas psiquiátricas.

jueves, 10 de noviembre de 2011

renuncias

De mi última entrada a hoy han pasado más días de los que suelo tomarme para actualizar este blog.

Ya ni me acuerdo de qué hablé en mi última cita con Claudia. Recuerdo que lloré como siempre. Y que la semana pasada fue muy dura laboralmente y por eso no pude actualizar el blog.

Aveces pienso que actualizar este blog es como actualizarme las neuronas y asi ponerle un poco de orden a tanto desorden interno. No sé si sirva de algo, pero verbalizar me hace sentir que las cosas quedan en algún lado, que los pensamientos se convierten en cosas tangibles y por ende menos dolorosas.

Ah si, ya me acuerdo, hablamos de la autoestima.

Buenas noticias niñitas, la autoestima, como yo decía está overrated. Y no es como un autobús o el saco de Mary poppins al que se le meten los infinitos problemas. La autoestima no existe. Lo que existen son las conductas y las defensas. Uno se defiende de las cosas que duelen y crea conductas. Esas conductas lo pueden llevar a uno al nirvana de la felicidad y la paz o pueden, como es el caso, llevarlo a uno a los rincones recónditos de la depresión y de las conductas autodestructivas y más interesante aún a la validación de esas conductas.

Uno termina amando aquello que le destruye. Y viceversa.

Sea lo que sea que eso significa yo me veo en una disyuntiva paralizante:

Porque mi conducta es la renuncia. Y la renuncia me pone en ese estado de vulnerabilidad y de indefensión del que hablabamos antes. Paralizada no puedo hacer nada contra mis desórdenes. La realidad es que la parálisis viene de esa decisión de renunciar al propio placer.

De sustituir el placer por el dolor.

Hay filósofos que dicen que el placer y el dolor son una misma cosa. Un continuum. Y uno pasa por aqui y por alla y se queda un rato por un lado y un rato por el otro.

Supongo yo que quedarse demasiado tiempo en un mismo sitio crea la patología y el desbalance y por eso uno se enferma...

martes, 1 de noviembre de 2011

esteem

una ilustración fabulosa
de esta fabulosa blogger
En los últimos días he estado pensando mucho en los motivos y comportamientos que me han traído a mi desordenado estado mental presente.

Según mi sicóloga todas las personas tenemos un modo personal de lidiar con nuestras ansiedades. Y esos comportamientos no deben ser juzgados como buenos o malos. Son comportamientos simplemente y como todo, tienen consecuencias. Cuando uno se da cuenta de que las consecuencias de esos comportamientos son igual de dolorosas que las causas, es cuando uno empieza el proceso de recuperación.

Que bonito suena no?

La cosa es que por más que los medicamentos le proporcionen a uno un colchón para descansar de las ansiedades y de la depresión, el comportamiento a suprimir sigue siendo mucho más efectivo para manejar las emociones. La sensación de confort y de alivio que nos dan sigue siendo más grande que un anxiolítico o un antidepresivo.

Y por eso es que uno tiene que ir a la raíz de todo.

Es enorme la tarea. Bueno, yo la veo enorme. Porque a estas alturas de mi vida me veo sin autoestima. Como una hormiga delante de un elefante. Yo sé que la autoestima está overrated. Pero también es verdad que no se puede andar para siempre por la vida arrastrando la voluntad para lograr cosas que uno cree que le van a proporcionar felicidad cuando la realidad es que la felicidad (que también esta overrated por cierto) deber surgir de uno cual fuente de agua fresca y no venir de afuera cual aguacero o monzón.

Y ahi es cuando uno se da cuenta del vacío. Ese vacío que yo me niego a aceptar que existe. Pero que está ahi presente como tan solo las carencias saben estar. Comiéndoselo todo por mi. El vacío es cuando la fuente se seca o nunca tuvo agua para empezar. Y uno no tiene de dónde sacar fuerzas para enfrentarse al elefante. La fuente está cerrada, o seca, o nunca existió.

No es como que me van a sacar de mi closet tibio y al dia siguiente voy a empezar a ser asertiva. Porque tengo media vida haciendo todo lo contrario.

Yo no pretendo estar saludable ni ser normal. Por ahora lo único a lo que aspiro es a que ese elefante deje de verse tan grande o empezar yo misma a verme como una domadora de elefantes.

jueves, 27 de octubre de 2011

self pity


Esto podría ser perfectamente
un frasco de laxante.
 Se está conviertiendo en una costumbre un poco molesta esto de ir a la cita con la sicóloga. No por ella, ella es buenísima y bellísima y me trata con muchisimo cuidado. Es por lo que significa ir: recordar el pasado y hurgar en los sentimientos y en las causas de los sentimientos. Y enfrentarse además a las conclusiones que ella saca de ahi y que me explica con calma.

Uno siempre dice que el pasado pasó y que hay que dejarlo allí. Pero no. Especialmente no cuando uno cae como caí yo en esta depresión tan fea. Entonces es casi una obligación retomarlo y reconvertirlo. En mi caso enfrentarme a todo lo que me he negado a sentir durante talvez demasiado tiempo.

Y admitir que eso es bueno para mi.

Después de la sesión aquella tan fuerte de hace dos semanas, no me había atrevido a volver a la terapia. Y ayer fuí con la firme intención de no tocar el tema de mi niñez ni el tema de mi relación con mis padres. Por supuesto que no pudo ser. Porque todo viene de allí.

Cuando le expliqué a Claudia lo que sentí después de la sesión, ella - obviamente - ya sabemos lo que preguntó: que sentiste? y bueno, sentí muchas cosas, entre ellas autocompasión. Self Pity.

La autocompasión casi siempre tiene unas connotaciones negativas, porque de alguna manera implica que uno no es suficientemente valiente o que uno es débil o quejica. Al menos para mí lo implica. Yo me resistía a admitir que había sentido conmiseración por mi misma. Como que me daba verguenza admitir ese sentimiento.

Pero mi linda Claudia me explicó que no siempre es malo sentir autocompasión. Especialmente no es malo si de hecho, te han pasado muchas cosas desagradables o difíciles. Todo lo contrario. Admitirlo ayuda a dejarlo atrás y a apreciar el enorme esfuerzo que uno ha hecho y dejar de ver ese esfuerzo como una carencia que uno tiene y verlo más bien como una cualidad buenísima.

Un poco lo más difícil del asunto en la terapia es ponerle nombres a las cosas. Y aceptar esos nombres.

Negligencia. Abuso emocional. Soledad.

Ver todos los signos visibles del desorden, de mi desorden, en absoluta evidencia. Recordar cómo escondía la comida, cómo la botaba, cómo lamía cubitos de pollo para controlar el hambre. Recordar que incluso, el cubito elegido permanecía en la caja, porque ese era el que yo chupaba. Y nadie lo tocaba.

Ver que nadie hizo nada por resolver aquello. La normalidad del absurdo.
- Déjala, es que ella es rara.

El orgullo de mi madre porque yo siempre estaba por debajo del peso mínimo. Y el esfuerzo mío por cumplir con aquella expectativa enferma.

Sentir autocompasión. Lamerme mis heridas. Destaparlas de donde las dejé encerradas, sin tocarlas y repararlas. Esa es la parte buena.

Verme de nuevo haciendo las mismas cosas asquerosas que hice entonces y más cosas, y tratar de entender por qué han vuelto a salir a la superficie de donde las enterré. Esa es la parte difícil.

martes, 25 de octubre de 2011

ni monólogo ni terapéutico

Yo como que por fin alcancé el nirvana de la terapia medicamentosa. La vida tiene colores de nuevo, y todo vale la pena. Hasta las cosas más idiotas, que no han dejado de ser tontas, han retomado su validez.

Mis cotufas pueden descansar tranquilas porque yo puedo descansar. Y puedo hacer tonterías.

La vida no es seria. Es divertida, pero a mí se me había nublado eso por completo y hasta respirar se me había hecho tortuoso.

Los pensamientos fastidiosos siguen ahi, no van a irse. Pero yo tengo el poder de hacerles caso o dejarlos ir y no hay mareíto constante que me impida ver la vida con claridad.

Y aunque solo tengo tres dias sin tomar laxantes y sé que no los voy a dejar al cien por ciento de un día para otro, ya no siento que eso es lo que gobierna mi vida.

De hecho, tengo una idea que le voy a comunicar a mi querida Claudia mañana, cuando sí tenga monólogo y puede que también sea terapéutico. Esto es, dos puntos, anotar lo que me vaya comiendo durante el día para poder darme cuenta en la noche, cuando me llegue la ansiedad, que en realidad no es tanto. También se que hay aplicaciones en el telefono donde uno puede ir haciéndolo y eso cuenta las calorías por uno; porque creo que parte del problema es que ocupo tanto tiempo en pensar lo que puedo - o no puedo - comer, o en lo dañinas que son ciertas comidas, que al final del día tengo la percepción errada de que he comido mucho. He comido con el pensamiento nada más en realidad, y la prueba es que no he engordado ni un gramo.

Asi que, pues eso. Un reality check para dejar la obsesión.

A mí no me importa obsesionarme, pero prefiero obsesionarme con cosas productivas que obsesionarme con las cotufas de mis neuronas.

jueves, 20 de octubre de 2011

help

Ay

Estoy en modo-comer.

Y lo veo venir. El pánico. A ver si me logro controlar y me mantengo en el medio, sin extremos.

Como hace la gente normal para no preocuparse? Como llegué a esto?

Insisto querido cerebro: no soy yo. Esto es un síntoma de la soledad, nada más...

lunes, 17 de octubre de 2011

change

El viernes mi Mellman me volvio a cambiar el antidepresivo, porque aunue estaba mejor, en una escala del uno al diez, yo seguía como en un cuatro para ser optimistas y se supone que cuando uno alcanza el beneficio del medicamento (lease, hace una semana) no debería echar para atrás. Básicamente el nuevo medicamento, Lexapro, es de la misma familia que el Celexa, solo que más intenso.  Y mas caro tambien. Pero al igual que el celexa no me causa efectos secundarios lo cual ya de por si es maravilloso.

El fin de semana ha estado bien, si mayores alegrías, sin mayores tristezas, por cierto: Gracias eme por tu llamada del viernes, eres como telepática tu :)...

Ojalá llegue el día en que pueda hacer las cosas sin poner un esfuerzo supremo en todo. Porque cansa vivir constantemente esforzada para las cosas más sencillas. Y ya yo detesto estar cansada, detesto estar triste, detesto tener miedo por todo.

Quiero cambios. Estar sana y no enferma, feliz y no triste ( o por lo menos no llorar por todo), energética y no arrastrada por los pasillos... Y el asco, que se vaya por dios, que se vaya.

jueves, 13 de octubre de 2011

monólogos psicoterapéuticos xiv

Ayer estuvo dura mi sesión. Yo no sé cual es el empeño de Claudia en hacerme recordar tantas cosas y en preguntarme que sentiste aqui y qué sentiste allá. Yo puedo recordar lo que pensé. Mas o menos, porque son cosas que he procurado olvidar. Pero tratar de recordar lo que sentí o verbalizar lo que sentí no es tan fácil y me causa una ansiedad tan grande que me bloqueo y no puedo ni entender lo que me dicen. Ella quiere llegar a las causas de mi depresión y mis comportamientos locos. Yo lo que siento cada vez que me siento en ese sofá es un mareo horrendo. La hora del mareo la he bautizado. Y admito que ese si que es cienporciento somático.

Me habló de tres etapas en la ansiedad. La primera es cuando uno mueve las piernas, por ejemplo. Esa está bien y es manejable. La segunda se vuelve visceral. Y uno siente dolor de estómago o mareos o sudor frío, etc. La tercera afecta las capacidades cognitivas y a uno se le olvida lo que esta diciendo o lo que está haciendo o se vuelve incapaz de concentrarse en las cosas cotidianas. Como una especie de incapacidad para hacer cualquier cosa. Yo creo que he pasado por todas esas etapas, la verdad.

También me habló de esta teoría psicoanalítica que me parece que es freudiana, que intenta explicar el comportamiento adulto a través de la evolución psicosexual infantil. Hay varias etapas en esa teoría y una de ellas es la etapa anal. Ella esta intentando correlacionar mi compulsión por tomar laxantes con eso. La compulsión de alimentarme y sentirme culpable por alimentarme y resolver el problema limpiándome por dentro. Proporcionándome el placer de desalojar mis intestinos de todo peso.

Es como si el peso emocional yo intentase saciarlo o resolverlo analmente.

Tambien me dijo mi Claudia que supuestamente el inconsciente "ordena" ese deseo infantil de jugar con las heces a través de la pintura. Porque con la pintura uno si puede permitirse la libertad del desorden. Ahi no hay que controlar nada. Y yo dije  - wow, parezco de librito...

Tambien está la etapa oral. La etapa de recibir placer oralmente. Esa como que tampoco la tuve muy resuelta porque yo lo que recuerdo de toda mi vida es no querer comer. Una lucha sin fin por engordarme que solo se resolvio cuando me casé. Talvez porque salí del infierno y pude al fin, comer.

El deseo infinito de sentirme amada por mi padre. Y a cambio de eso recibir solamente maltrato y rechazo.

La venganza estaba en la comida y en el comportamiento prohibido y secreto.

El caso es que despues de una sesión tan dura, yo fui incapaz de cenar. Saqué las cosas de la nevera para preparar algo y todo estaba podrido. Asi que me dediqué a botar comida podrida. Eso se ha vuelto tambien un placer. Un placer que es un pecado, claro, la comida no se bota. Pero la comida podrida si se bota.
Ni idea de si esa xomida estaba mala o no. Yo la vi mala y eso me basta.

martes, 11 de octubre de 2011

did you take your pills today?


como una tortuga tranquila y feliz
 I did!

Y me va maravillosamente bien con ellas! nada de efectos secundarios ni mareo constante ni nada de eso. Es como haber vuelto a nacer. (Creo y espero). Sonrío por todo, me siento energética. Me creo capaz de cualquier cosa. De lo que yo quiera. Y no es que quiera hacer nada exagerado. Solo quiero cosas simples.

Y la simplicidad me hace feliz.

A todos los que sufren les digo: pidan Celexa. Es una maravilla.

I LOVE MY PILLS!

Mi Mellman tenía razón otra vez, es como tener diábetes y que te den insulina.

Yo tengo depresión, y cuando me dan mi serotonina, se me quita todo!

miércoles, 5 de octubre de 2011

vacaciones

Cuando termine de trabajar hoy, a eso de las cuatro de la tarde, estaré oficialmente de vacaciones durante cinco días. Hoy me parece una eternidad, claro, y tengo MILLONES de planes, claro. Mañana seguramente ya estaré desilusionada porque son muy poquitos días.

Lo maravilloso de estas vacaciones es que no voy a ninguna parte. Me quedo en casita limpiando y alimentando mis obsesiones tranquilita y sin que nadie me joda. Planeo hacer yoga, correr, pasear a la perra, comer frutas, pintar, ver peliculas, pasear, etc.

Ser feliz, en resumen.

Deséenme suerte.

viernes, 30 de septiembre de 2011

pintar

Tengo la depresion desatada hoy.

No tengo ganas de nada...

Todo me parece una ilusion falsa. Sin ganas de vivir, definitivamente.

En el desayuno me di cuenta de que todo me da asco. Me he limitado la dieta a cosas especificas y no salgo de ahi. Y es que ya no puedo. Es como una obsesión. Me da miedo comer cualquier cosa que no sea lo que ya tengo predeterminado en mi cabeza. Y aveces hasta eso me cansa.

Tengo que acordarme de comprar un protector gastrico y enzimas digestivas. Talvez eso me ayude un poco. Ah y puedo tomarme el te ese de desintoxicacion.

ya se..

comprar los lienzos, pintar.

pintar, pintar, pintar.

jueves, 29 de septiembre de 2011

monólogos psicoterapéuticos xiii

No estoy muy segura de si verbalizar los problemas que uno tiene sea beneficioso para desenredar las causas del comportamiento no deseado.

Casi simpre que verbalizo lo que me sucede, comienza a temblarme la voz y me mareo y quiero salir corriendo a no sé dónde.

Es decir, cada vez que voy a la terapia, salgo pensando, uy, que mal estás. Cada vez que verbalizo mis pensamientos sobre las cosas, termino mirando a Claudia (la sicóloga) con cara de

-yoséqueesabsurdoloqueteestoydiciendo -.

Ayer Claudia me aproximó la idea de asistir a un grupo de ayuda con personas que sufren de desórdenes alimenticios.

- No Claudia, esto es un síntoma más del desastre que soy, no es la raíz. Yo puedo controlar esto...

- Esta bien, Adriana, pero por lo menos, de tarea, esta semana no tomes laxantes, vale?

- Vale...

Vale?????

Si los laxantes son casi tan necesarios como el xanax o el antidepresivo!

Si no tomo laxantes, entonces hay que controlar la comida y yo ya estoy a nivel de sopa, fruta, yogurt y ya. Y yo se que hay que comer. Yo soy una adulta. Yo se que con la salud no hay que jugar.

Pero esto no es un juego, es una enfermedad con vertientes divertidísimas que hay que sortear aunque uno lo que tenga es ganas de desaparecer.

Pongámosle pues, algo de humor. El humor lo cura todo no?

Prometo morirme de risa cada vez que mi mente me diga "tu no puedes comerte eso"...

yeah, right.

lunes, 26 de septiembre de 2011

nada

Nada nuevo, más de lo mismo.

El viernes me cambiaron el antidepresivo. No más zoloft.

El nuevo se llama Celexa y es para tratar mas o menos todo. Le comenté a Mellman de mi intento fallido de estar sin pastillas. Su comentario fue: 
- Igual que hay personas que tienen diabetes, o alguna otra underlying condition como el colesterol alto, tu tienes depresión y necesitas tus pastillas.

Cambié el horario y ahora la tomo en las noches junto con el Xanax. Perfecto, porque asi tengo coctel atómico para dormir. He tenido pesadillas todas las noches, eso si. Y como estoy tan drogada, ni me despierto. O me despierto, me tambaleo al baño y vuelvo con el tambaleo a la cama de nuevo.

So far, so good, nada de mareos insoportables. Ahora estoy tomando solo una pastilla, se supone que debo llegar a tres para la nueva cita dentro de dos semanas. Y observarme, como siempre. Hoy van tres dias, asi que hoy tomaré dos, y veremos que tal.

Lo único diferente que observo por ahora es el mal humor. Estoy de mal humor. Pero no creo que se deba a la pastilla. Vamos a dejar de echarle la culpa siempre a las drogas no?

Tengo muchísimos cuadros en mente, dibujos, obras que quiero hacer. Pero no me da la vida para tanta cosa y eso me frustra un poco. El afan de perfeccionismo. Y yo, que me paso los fines de semana limpiando todo obsesivamente sin parar.

jueves, 22 de septiembre de 2011

crisis

Ay cómo me gustan a mí las crisis! Si es que soy una drama-queen. Yo cuando sufro, sufro de verdad, no sufro a medias. Aveces me pregunto si todo el tema de cambiar de antidepresivo o dejarlo o lo que sea es por mi tendencia a ser drama-queen. Ya que no tengo problemas, me los invento. Te acuerdas eme? siempre decíamos eso.

El caso es que la fabulosa vida del mareíto constante se terminó. Ya no estoy mareada. Ahora lo que estoy es de vuelta a la casilla numero uno. Como en uno de esos juegos de escaleras y serpientes, que si caes en la casilla equivocada te vas pal foso. Pues asi. Casilla número uno, and let's begin again.

Mañana, si es que no estoy commpletamente despistada, tengo cita con Mellman. Menos mal que la secretaria me llama siempre el día antes. También decidí tomarme el día libre después de esta semana tan dura emocionalmente. Y laboralmente.

Esto de llorar el alma cada noche, non mi piace, no.

Tengo en la mente esta idea, de la auto-aceptación. Que uno tiene que aceptarse a sí mismo. Quererse.

Yo es que no sé. A mi eso me parece de una mediocridad supina. Quererse si, claro hay quererse, pero aceptarse, no lo llevo claro. Mejorar, mejorar, ser siempre mejor, ya tiene como más sentido no?

Y mi padre. Y los recuerdos del infierno. Yo quiero volver a tomar una pastilla que me haga olvidarme de todas esas cosas. Que me lobotomice los recuerdos y todo lo que ellos traen consigo.

El resto de mi vida quiero estar liberada de todos los traumas. Poder mandar a la mierda los traumas, pero con ganas. A patadas. Que no me definan nunca más las vergüenzas de los otros. Y si esto es a punta de pastillas, pues así será. No tengo las fuerzas para hacer esto sola. Ay pero que asertiva! si es que eso es aceptarse!

Acepto pues, mi debilidad, acepto mi fragilidad.

Señores, yo no soy fuerte. Adriana: no eres fuerte. Eres tán frágil como cualquiera.

martes, 20 de septiembre de 2011

monólogos psicoterapéuticos xii

Vivo sin vivir en mí. Como la santa aquella, sólo que no tan santamente...

 - Talvez la decisión de dejar el antidepresivo se deba más a la necesidad de volver a sentirme yo que al mareo constante. De volver a sentir, en realidad, dejar de vivir en la nube de la droga y sentir.

Ahi claudia me paró y me dijo  - Eso es interesante.  - Porque en otras ocasiones has dicho que te aterra sentir.

Lo cual es cierto. Me aterra sentir. Me aterra, sobre todo el dolor. Y sin embargo, no puedo vivir sin él. Sin volver una y otra vez a regocijarme en mis miserias. En mis carencias. En mis incapacidades.

Porque mis carencias me definen, porque mis carencias me hacen fuerte. Sin ellas, no soy nada, no tengo un motivo para luchar. Estoy definida desde el vacío. Me drenaron las ilusiones en la infancia y ahora sólo existo desde la persectiva de defenderme. Y cuando no tengo algo contra lo cual necesite defenderme, me deprimo. No sé sobrevivir de otra manera.

Ahi Claudia me volvió a interrumpir y me dijo - Eso es clave también. Sobrevives, defines vivir como sobrevivir.

Sobrevivo. La verdad no tengo ni idea. Todos los demás saben vivir y no sienten esta angustia. Ah!, cómo los odio, a todos.

Yo estoy obsesionada con morirme. La obsesión suicida es como una droga también, que me calma. La perspectiva de detenerlo todo. Parar de existir y comunicarle al mundo -  Vivir es absurdo! Porque no sólo debería morirme yo. Deberíamos morirnos todos. La vida en general, carece de sentido. Si las cosas no tienen sentido, es como si no tuviesen permiso para existir.

Existir, en sí mismo es absurdo. O talvez tan sólo el pensamiento es absurdo. Pensar.

Vivir metida en mi pensamiento me atormenta. Vivo en el infierno de un ser que me dice tu no puedes hacer esto o aquello. Tu no puedes comer esto o aquello. Tu no puedes sentir esto o aquello. Todos los demás si. Pero tu no. Tu no. Tu eres distinta. Tu eres otra cosa, por ende no puedes hacer lo mismo que hacen los demás. Tu no.

Vivir en el reino de la pureza. Ser pura y no contaminada. Vivir del arte, vivir del amor. Aunque el amor no sea para ti. El amor es para los demás. Todos ellos si, tu no. Tu eres fuerte, ellos no. Tu no necesitas eso. Tu lo que necesitas es disciplina y orden. Eso y morirte, sobre todo. Morirte lo más pronto posible.

Reconozco cognitivamente mi obsesión autodestructiva. Actúo en consecuncia, si.

El dolor está alli, calladito estos días.

- No me ataques por favor dolor. Cállate. Sobre todo cállate.

- Pero de qué otro modo puedo callarte, mas que matándote?

...

Un inciso posterior que no tiene nada que ver: Lo bueno de sentir asi es que me pongo deliciosamente creativa. Y eso sí que lo echaba de menos. Esa que me destruye, es impresionante con lo de la creatividad. Talvez no hay que matarla sino reencauzarla no?

miércoles, 14 de septiembre de 2011

bang, bang, bang

Requete caída, mejor dicho. Pero vuelta a levantar, eso si. Y te limpias las rodillas, y te das un cariñito en el chichón que te hiciste contra la pared. Putas paredes duras que todo lo curan.

Putas pastillas de mierda. Puta depresión. Puta obsesión y todas las consecuencias que me regalas.

Ay que lindos regalitos! es navidad!

Que insultadera no?

Es lo que hace el mal humor de mierda.

Débil, porque no puedo sola. Y estoy sola. Por cierto, puta soledad.

Débil, porque soy presa fácil de los ataques y me escondo, me escondo... ah! los rincones: maravillosos pozos de poesía clavada en el suelo. Maravillosos delirios que me hablan, me hablan, mientras me golpeo.

Eso si, el baño está ordenadísimo y pulcro.

Pero tengo que sacar toda la comida podrida de la nevera. Hace más de una semana que no me la como.

Hay que dejar la nevera limpia. Sólo la comida de Isa, eso si.

Débil, porque el miedo hace de mí una masa amorfa y descontrolada. Incapaz de hacer lo más básico de la vida.

Por eso insisto: hay algo que yo no sé. Una carencia que me carcome. Y nadie quiere decirme la verdad.

Ayudarme a vivir.

La única opción que conozco: volverme dura. Por fuera, claro, porque adentro es un flan, una gelatina derretida, un majarete pues. El majarete, jajajajajaajaja.

En fin, esto ya lo sabíamos, una de cada tres personas, recae cuando deja de tomar el zoloft. Ya veremos cómo me va con el siguiente...

lunes, 12 de septiembre de 2011

dizzy spell

Yo pensaba cantar victoria hoy: tercer día que no tomo el antidepresivo. Pero no voy a cantar victoria nada, porque el mareo lo que ha hecho es ponerse peor y a prueba de toda voluntad y calma y pensamiento zen...

En lo que termine de escribir esta entrada, querido diario, me voy corriendo (bueno, creo que mejor caminando lentamente) a la farmacia con mis prescripciones a que me den mi mierda. Mellman, yo hago lo que tu digas, pero sacame de aqui!

Hoy el mundo da mas vueltas que nunca y hace nueve años que nació mi niña.

Mi niña bonita. Feliz cumpleaños princesa. Tu mami te adora aunque seas una despeinada!

viernes, 9 de septiembre de 2011

la fabulosa vida del mareíto constante parte cuatrocientosmilquinientosveintisiete

Y ahora a quién le echamos la culpa niñitas?

Porque yo sigo mareada. Más mareada que nunca.

Especialmente mareada después de comer. Cada vez que como = me mareo.

Weeee, el mundo da vueltitas!!!

también podemos hacer eso, enjoy the ride girls!

Ya, hoy me toca bajar la dosis a la mitad de la mitad... y en dos semanas más, psiquiatra.

No asistí a mi terapia ayer, porque tenía mucho trabajo... básicamente tengo mucho trabajo porque no me concentro nadita de nada y trabajo lentísimo. El movimiento de mirar los números y la pantalla y luego el teclado es un suplicio y el dolor de cabeza no se va, no se va.

Es como la lluvia, que tampoco se va.

Excelente. Pero ayer me divertí un montón mojándome los pies y llegué empapada a mi casa.



miércoles, 7 de septiembre de 2011

vegan

Esta entrada será corta.

Numero uno: estoy mucho mejor, no más mareo punto com. Fabuloso. Gracias a todos/as los/las que se preocuparon por mi. Y estoy manejando bastante bien la depresión, de hecho no me siento deprimida en lo absoluto. Uno siempre se levanta de todas las caídas, no matter what.

Numero dos: he decidido no volver a comer cadáveres semi descompuestos de animales. Es asqueroso y no tiene sentido comer animales muertos. Los animales muertos no son comida. Son cadáveres. Y yo no quiero comer cadáveres. Me niego. No es que quiera ser green ni nada de eso. Tampoco que me haya vuelto orgánica ni zen. Sencillamente no soporto más la idea de comer muertos.

Supongo que parte de mi recuperación dentro de este desespero que ha sido la depresión y la ansiedad, y el largo etcétera que ha venido después, pasa por dejar de comer cosas que están podridas. Solo así me puedo sentir mejor. Alejada de la asquerosidad.

No se mucho que voy a hacer con los huevos. Los percibo ambiguamente como cosas aguadas y malolientes. Fetos no natos. Visceras incompletas que salen de las gallinas. A ver, que puede haber mas asqueroso que una gallina? Cierto, una paloma.  Tampoco voy a comer huevos de paloma. Ni de codorniz.

De todo lo demás si voy a comer, excepto azúcar, porque el azúcar es venenosa. Me lo dijo mi mamá.

Eso es todo.

viernes, 2 de septiembre de 2011

monólogos psicoterapéuticos xi

El mundo está lejos. La realidad no existe. Soy yo, mirándola desde lejos.

Hay algo que todos los demás saben y que yo no sé. Por eso todos pueden ser felices y yo no.

Y además nadie me lo quiere decir.

Juegan conmigo, como una gato con su presa y yo voy de boca en boca, preguntando y preguntando a ver si logro que alguien se apiade de mi y me lo diga.

Es mi disociación la que me mantiene lejos de la realidad, todo el tiempo bailando hacia adentro. Como alguien que tuviese la piel volteada, los ojos volteados y tratase desesperadamente de sentir y de ver lo de fuera.

El límite entre el afuera y adentro es un cuchillo. Yo quiero un cuchillo rosado para atesorarlo como un poema. Ir guardando palabras, coleccionista, vestida de huesos.

El delirio me alimenta, me nutre. Drogas del adentro, drogas del afuera...

La paciente está tranquila, y todo va a estar bien.

miércoles, 31 de agosto de 2011

ups and downs

Lymphadenopathy Cervical - The lymph nodes in the neck, which are part of the body’s immune system get swollen and enlarge by reacting to the presence of a drug. The swelling is the result of the white blood cells multiplying in order to fight the invasion of the drug.

There you are

Uno mas que agregar a la lista!

Ahora mis ganglios estan inflamados, no puedo tragar bien y el oido me duele espantosamente. Maravilloso.

Querido Zoloft: TE ODIO.

lunes, 29 de agosto de 2011

acción y reacción

Hay una ley de la física que dice que a toda acción le sucede o le contradice una reacción. Si empujas algo, ese algo te empuja de vuelta y el único modo de vencer esa fuerza es aplicando trabajo.

A menos que ese algo decida que ya basta de aplicar las leyes de la física y sencillamente se abandone al empujón sin más y se dedique a mirar desde lejos a dónde lo lleva dicha fuerza que le acaban de aplicar.

Mientras uno más se aleja del problema en cuestión o del empujón en este caso, menos importante parece y hasta resulta un poco irreal o absurdo cuando se mira a distancia.

El ombligo adquiere una dimensión ridícula cuando está apartado. Desaparece de un todo como en una fotografía pixelada. Hay quienes viven empujando a los otros para lograr un espacio en el grito que es vivir mostrando los ombligos. La supervivencia del que golpee o muerda más fuerte. Mientras más fuerte muerdo, menos daño me hacen los ombligos de los otros y menos recuerdo mi propia debilidad.

Y todo para qué; si el destino nos espera  todos igualito de aburrido y monótono.

Vivir no es más que morir lentamente y arroparse con el olvido.

viernes, 26 de agosto de 2011

drugs (monólogos psicoterapéuticos x)

Bien por mi??? ...  whatever

Como ya me he quejado por aqui muchisimas más veces de las que quiero recordar, a mi no me va demasiado bien con mi medicina para la depresión. Demasiados efectos secundarios que incluyen, dos puntos, sangrado por la nariz, fatiga, letargo, apatía, vértigo, nerviosismo, palpitaciones, despersonalización, dificultad de concentración, falta de apetito, paranoia, entre otras menos fastidiosas como el hecho de no sentir ninguna emoción y la más temida, la dificultad para alcanzar el orgasmo...

Asi que he decidido... que no voy a tomarlas más. Y he procedido a informarle a mi querido Mellman (mi siquiatra) de mi decisión.

Me ha sugerido (I will strongly reccomend you) que baje la dosis pero intente quedarme con la medicación. Que le avise si me vuelvo a sentir deprimida y si vuelvo a tener ganas de suicidarme. Y que si aguanto con 25mg, que me quede alli y no baje más. Y que nos vemos en un mes.

Voy a probar con eso y voy a intentar quedarme con el tratamiento. Pero si la cosa sigue mal, lo voy a eliminar por completo.Yo no puedo funcionar asi. Sencillamente no puedo. Prefiero arrastarme llorando por las paredes y los rincones que seguir viviendo la fabulosa vida de los efectos secundarios del Zoloft.

Mi preocupación en este momento es que (no podia ser de otra manera) dejar la droga no es tan fácil asi y uno puede llegar a tener síntomas de abstinencia casi más desagradables que los efectos secundarios de estar drogada. Incluyendo (todavía más) ganas de suicidarse, convulsiones y por supuesto, la recaída en la depresión.

Que fastidio, coño.

Cómo no va a querer uno morirse asi. Que alguien me recoja, por favor... que ya no puedo más sola!

jueves, 25 de agosto de 2011

REM

Este blog surgió originalmente con la idea de tener un espacio anónimo para desahogar mis problemas con el insomnio y mi desesperación. La primera vez que escribí fue el día que llame por primera vez a una sicóloga porque ya no aguantaba más seguir existiendo. Ya no es anónimo mi blog y tengo muchos/as lindos/as segudores/as. Hoy en día después de seis meses y un diagnóstico de depresión severa y  muchos muchos fármacos mediante, duermo divinamente casi todas las noches. Otras cosas han sucedido en mis terapias y otros diagnósticos han surgido, pero esos no han cambiado mis prescripciones. Parece que Mellman tuvo buen tino desde el principio con lo que me recetó.

Sin embargo hay un efecto secundario que sigo experimentando y que ya no me esta haciendo ninguna gracia. Ya he hablado con anterioridad de él y aunque yo lo llamo jocosamente la fabulosa vida del mareíto constante, la realidad es que ya no lo soporto más. Mi linda sicóloga Claudia, atribuye mi mareo a mi depresión. A mi negativa a sentir y a aceptar las cosas que siento. Dice que lo somatizo todo. Yo pienso que es producto simple y llanamente de los fármacos. A este efecto hay que añadir el hecho de que mientras más mareada estoy, menos me logro concentrar. y se supone que los sítomas dela depresión ya no los tengo.

Recuerdan a la señora de la mirada perdida?

Yo temo que me estoy convirtiendo en eso.

En una señora drogada, sin ganas de prestar atención a nada porque el esfuerzo que supone enterarse de lo que sucede a mi alrededor me deja drenada y agotada. Tampoco deseo comer y no es porque tenga un desorden alimenticio. Es que la comida me da asco y no sé qué comer. (acaso no es lo mismo?? - whatever). Paso horas planificando lo que voy a comer para que sea "seguro", sin enterarme mucho de qué significa en realidad un alimento "seguro". Algo que no esté descompuesto, eso es lo primordial, aunque quede con hambre y miedo después.

Pero en realidad mi disertación de hoy es acerca de el sueño REM. (rapid eye movement por sus siglas en inglés). Hay mucha gente que afirma que los sueños se producen en esa etapa. Sin embargo tal afirmación no ha sido comprobada. Los antidepresivos como el que yo tomo, inhiben la etapa de sueño REM y hay estudios recientes que afirman que la supresión de dicha etapa, mejora notablemente los cuadros de depresión.

En mi caso, estoy visiblemente mejor de la depresión aunque no de la ansiedad, pero eso es por mi situación personal presente. Ahora que estoy medicada, también tengo muchos más sueños que antes y son más vívidos y me gustan mucho más. Asi que puedo afirmar de primera mano que el sueño REM no es el que contiene los sueños ni el que nos hace recordarlos. Lo que aún no se conoce son las consecuencias de dicha inhibición a largo plazo. Yo les prestaría gustosamente mi cerebro para que me lo investigases, quede hecha la invitación

Por ahora prefiero seguir adicta a mis fármacos aunque viva la maravillosa vida del mareíto constante y tenga la expresión de la señora de la mirada perdida y azul.

lunes, 22 de agosto de 2011

control-kaos

Ayer por la mañana, mientras luchaba contra mi aversión por la comida y me obligaba a mi misma a prepararme un desayuno,  me preguntaba de dónde venía ese ataque de pánico y asco. Vale la pena resumir que el viernes me atiborré de comida y que terminó como era de esperarse en un pánico total y que tomé medidas compensatorias ante tal desbande alimenticio.

El caso es que en mi lucha cognitiva por convencerme de que está bien desayunar sobre todo cuando uno siente hambre y mientras la desordenada que vive en mí trataba de convencerme de lo contrario porque la comida lo que hace es engordar, un diálogo divertidísimo que se traían ambas a costa de mi temblequería delante de la tabla de la cocina. La desordenada que vive en mí casi casi gana cuando argumentó que uno necesita tener una estructura para el mundo no se desbarate. Y que la estructura yace en una alimentación controlada.

Yo me resistía a aceptar que la raíz del desorden y mi enfermedad fuese una necesidad de control, porque yo ando controlando a nadie mas que a mi misma.

Pero tengo que aceptar la evidencia de que cuando estoy restringida, es decir controlada y estructurada o mejor dicho comiendo poquito, estoy tranquila mentalmente, aunque a los pocos dias me ataque la debilidad física y por consiguiente la depresión y la ansiedad. Es decir, el control me lleva al caos.

Al contrario cuando estoy descontrolada, comiendo lo que me da la gana y cuando me da la gana, me gana la ansiedad de sentirme a la deriva del mundo y sus opiniones y siento que el mundo es un caos y que yo necesito añadirle estructura porque si no lo hago el universo es un agujero negro y me siento perdida.

Total que esta vida mía es un tira y encoge de caos-control control-caos que me recuerda aquella serie divertidísima del agente 86. Al final me reí de mi misma y me comí mi desayuno y lo disfruté no sin sentirme un poco culpable después por no haber sabido controlarme...

Querida Claudia: este jueves te espera una sesión muy divertida.

viernes, 19 de agosto de 2011

drama queen party

Pero no party de fiesta sino de partido, que no político, ojo.

Yo estoy siempre del lado del drama. Cual Tosca llorando porque vive por y para el arte pero igual su destino es la oscuridad y la muerte.

Soy una hija del postromanticismo. La gente no se ha dado cuenta pero vivimos la edad del postromanticismo, dentro de nada vamos a estar todos lánguidos y vestidos constantemente de encajes. Así es la decadencia. A mí es me fascina el drama y la decadencia.

Yo soy una artista, por lo tanto no podría estar en otro lado. No estaría cómoda, no estaría en mi medio, no podría nadar ni volar en las profundidades de mi oscuridad e ir sacando de allí palabras ni imágenes que me alimenten.

Prefiero estar alimentada de drama aunque eso no sirva para nada, que ser una muñeca hermosa y deseable.

Sin embargo cada mañana el espejo me devuelve la imagen de una mujer hermosa.

Estoy considerando cortarme el pelo al rape a lo Emma Watson a ver si asi me veo menos bonita. Vaya usted a saber por qué.

Será que me quedara bien??? o me veré como una gorda amorfa??